Camila Barreneche, nueva Directora Académica del Diploma de Experto en Plásticos

Entrevistamos a la Dra. Camila Barreneche, que asume la Dirección Académica del Diploma de Experto en Plásticos, la formación impulsada por el CEP con titulación certificada por el Instituto de Formación Continua IL3 de la Universidad de Barcelona. Barreneche también se incorpora al claustro de profesores de esta formación global en la industria del plástico que en enero arranca su quinta edición.

En primer lugar, para los que no la conocen, ¿podría presentarse?

Me llamo Camila Barreneche, soy Licenciada en Química con especialidad en Ciencia de Materiales. Realicé la tesis doctoral en la Universitat de Lleida en temas relacionados con el Almacenamiento de Energía Térmica pero siempre utilizando materiales reciclados o relacionados con el tema de los plásticos como fuente secundaria de recursos. Me doctoré con Cum Laude en julio de 2013 y desde septiembre de 2013 empecé mi actividad docente en temas relacionados con materiales para la sostenibilidad y materiales poliméricos.

He sido investigadora post-doc desde 2013, el primero fue focalizado en un proyecto europeo basado en el material que desarrollé en mi tesis doctoral donde conseguí encapsular un residuo del proceso de reciclaje del acero y que es considerado peligroso, en una matriz polimérica. Como ayuda de proceso utilicé un aceite parafínico que actuaba como material de cambio de fase a temperaturas próximas a la ambiental. Esto permitía que ese material cargado con un 70% de polvo de acería, tuviese un efecto termorregulador de la temperatura ambiental. Por eso su aplicación fue básicamente focalizada en construcción como material inteligente.

El segundo post-doc fue relacionado con la encapsulación de materiales de cambio de fase en matrices poliméricas, y lo llevé a cabo gracias a una beca Juan de la Cierva que me otorgó el ministerio.

El tercer post-doc fue focalizado en la termo conformación de materiales poliméricos mediante extrusión para su impresión 3D, por ejemplo. Este post-doc lo realicé en la University of Birmingham (UK) en el centro Birmingham Center of Energy Storage.

Desde mi inicio académico como profesora, me he focalizado en temas de sostenibilidad, materiales para la energía y materiales poliméricos.

En su opinión, ¿qué relación existe entre el mundo universitario y la industria? ¿Cree que una formación como el Diploma de Experto en Plásticos del CEP puede ser un buen nexo entre los dos?

Mi opinión se basa en mi experiencia docente e investigadora. El ecosistema de empresas transformadoras de plásticos tiene muchísimo conocimiento empírico que es muy difícil que se explique en una clase teórica universitaria. De hecho, es difícil compactar esa información sin tener un conocimiento práctico directo con las máquinas que termoconforman polímero, por ejemplo. Este curso, creo que es extraordinario porque consigue ese equilibrio entre lo que la empresa hace o requiere y los aspectos más teóricos de ese conocimiento. Para mí, es esencial para que la industria haga un paso adelante así como para alumnos que quieren tener conocimiento del campo de los plásticos.

Se estrena como Directora Académica de este curso, ¿qué supone para usted y qué cree que puede aportar?

Creo que puedo poner valor en como el conocimiento teórico puede ayudar a dar soluciones a problemas muy diferentes que puede tener la industria del plástico. También haciendo hincapié en que el plástico no merece la fama que tiene si se utiliza de la manera correcta, claro.

Mi aportación a nivel académico vendrá de la mano de dos contribuciones, una en el primer módulo donde explicaré casos reales de investigación universitaria relacionada con los plásticos y otra donde daré una visión de como el plástico puede contribuir a las 3R: reciclaje, reutilización y revalorización.

¿Cuál cree que son las ventajas de continuar formándose y en concreto en una formación con clara orientación práctica como la que nos ocupa?

Si una persona no continua en formación en su vida laboral quedará obsoleta incluso antes de lo que se espera. Es indispensable para la industria invertir en que sus empleados aprendan los avances en el campo en el que se desarrollan sus actividades para poder tener posibilidad de ser competitivos a medio plazo, y no desaparecer a largo plazo. En una palabra, la formación continua es imprescindible para continuar en el mercado.